La Cooperativa Agropecuaria de Consumo Aromáticas Altovalle Ltda. tiene su sede en la localidad de Fernández Oro. Su actividad comenzó en 2004, en forma de Asociación Civil, de la mano de cuatro productores que se unieron para producir orégano como alternativa al monocultivo de peras y manzanas. Luego, su búsqueda los llevó a experimentar con otras aromáticas que se pudieran implementar en el clima frío de la zona.

En 2009 se constituyen como empresa social, y con esta nueva figura recibieron a más familias productoras. Con la ayuda del Municipio, pudieron ubicar su actividad en un complejo agroindustrial en el cual funcionan, también, otras cooperativas. Además, cuentan con una Ingeniera Agrónoma que brinda asesoría técnica y productiva para propiciar los cultivos.

La presidenta de la entidad, Karina Navamuel, contó: “La historia de la Cooperativa en sí es interesante, porque está donde está gracias a que supo adaptarse a los cambios. Eran pequeños productores, tenían una sala de procesados, y en su momento se comercializaba en el lugar, con atención al público y en ferias”.

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“Con la pandemia, tuvimos que bajar las persianas y se vio la necesidad de alternativas para vender y tener dinero para los socios. Así que se empezó a hacer toda una actualización a lo digital, y empezó a crecer el e-commerce. Ahora tenemos una comunidad de más de 150 mil seguidores en redes sociales, y el 80% de las ventas se hace a partir de la página web. Fue un crecimiento muy grande, y nos permitió llegar a más hogares”, afirmó.

En esa línea, expresó que “los asociados que están dentro de la Cooperativa empezaron a buscar más asociados, porque llegó un momento en el que no dábamos abasto. Se incorporaron familias y crecimos. Después incluimos la posibilidad de hacer pasantías, a pactar con productores de la zona, y ahí podían conocernos, y nosotros conocer sus productos para ver si podíamos trabajar juntos”.

Valor agregado con distribución nacional

Cada productora y productor de Aromáticas Altovalle cuenta con su propia chacra en donde genera materia prima de forma agroecológica, sin agregados químicos, y luego lo seca a la sombra para no perjudicar su aroma y color. Una vez seco, lo trasladan al complejo, en donde inicia el ciclo productivo.

Una de las posibilidades es la venta a granel, para lo cual únicamente se elige el tamaño de paquete que será comercializado. También pueden elegir extraer los aceites esenciales e hidrolatos en el laboratorio, para la venta; destinarlos a la elaboración de cosméticos como cremas, jabón, y tónicos para la piel.

“Trabajamos con muchos productores que no son asociados, pero que les interesa procesar sus productos. La Cooperativa le compra la producción y después se organiza todo el proceso. Para eso, nos conectamos con productores de la zona, de otras cooperativas, también de Córdoba, Mendoza, para sumar más productos y ampliar la gama de condimentos, y de aromáticas”, puntualizó Navamuel.

Respecto a su perspectiva ante el escenario político y económico, la referente anticipó: “Si bien es un momento bastante duro, puedo decir que estamos bien y vamos a estar mejor. Estamos aprovechando que hay mucho trabajo y mucho personal, capacitando a mucha gente de la zona. Y estamos incursionando en los invernaderos para poder llegar a tener plantines, que permitan iniciar procesos productivos. Tenemos muchas expectativas, muchas ganas de seguir creciendo. Tenemos mucho potencial, y queremos aprovecharlo”.

Fuente: Elaboración propia a partir de entrevista realizada por Radio comunitaria Ore Tape (Benito Juárez, Buenos Aires).

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