Desde la localidad rionegrina de Río Chico, la Cooperativa Agrícola Ganadera Nuevo Río Ltda. surgió para das respuestas a las necesidades de un grupo de productores para mejorar sus ingresos económicos, puntualmente en lo relacionado a la producción primaria. Actualmente, la empresa está compuesta por 32 familias y personas adherentes que colaboran con los proyectos.

El presidente de la empresa social, Mario Manquilef, refirió: “Nuestra Cooperativa es particular, si uno toma como referencia al resto. Hay muchas cooperativas en la zona, la mayoría son agrícolas ganaderas, pero la mayor actividad es ganadera, con productores dispersos”.

“Nosotros tenemos socios de la comunidad peñi mapuche, así que nos dedicamos a la cuestión agrícola. Un noventa por ciento de forraje, y diez de agricultura”, especificó. En ese sentido, explicó que la decisión de organizarse tuvo como objetivo fortalecer el parque de maquinarias de labranza primaria, lo que es arado, rejas, tractores, y la cosecha de panza.

En ese sentido, el rol de Manquilef fue clave, ya que se encargó, desde la Comisión de Fomento de Río Chico, de organizar a los trabajadores: “En ese momento teníamos todo en contra: maquinaria rota, no había posibilidades de comprar nada nuevo; no podíamos acceder a créditos por no pertenecer a una organización. Una estrategia fue conformarnos como Cooperativa. Y, desde ese año, integrantes de la Cooperativa cultivan”.

“Me pareció que la Cooperativa era la salida. Pero antes había habido una Agrícola Ganadera grande en la zona que no tuvo un final feliz, entonces los productores estaban bastante reacios”, expresó.

Sumar posibilidades

En sus inicios, contaron con la asistencia del Gobierno de la Provincia de Río Negro, para buscar resolver las problemáticas que había en el sector de los chacareros. Puntualmente, el acceso limitado a herramientas, y la baja producción.

Además del aporte para comprar maquinarias, lograron solventar la construcción de un galpón grande en donde se guardan los fardos.

Los productores viven alrededor del Río Chico, que divide en dos el vallecito, y en cada margen hay una chacra de extensiones chicas, con un total de 170 hectáreas de producción y 300 sistematizadas, listas para producir: “Una de las limitantes es la cuestión económica, y otra el recurso hídrico”.

“Hoy estamos brindando un servicio, con las terribles dificultades que significa este cambio económico que hay en el país. Río Chico no tiene distribuidora de combustible, y nosotros para realizar cualquier actividad necesitamos gasoil. Tenemos que pagar un transporte para trasladar el combustible de otras localidades, porque acá no hay”, indicó el referente.

Sin embargo, su autogestión les permite seguir adelante y proyectar mantenerse como prestadores de servicios a los productores: “Hemos permitido que se siga haciendo la misma actividad. Al menos seguimos existiendo, que no es poco. Estamos tratando de sumar gente joven en la organización. Las chacras las hemos recuperado, no hay ningún productor que no pueda hacer nada, la coop siempre da una mano”.

Fuente: Elaboración propia a partir de entrevista realizada por programa Nuestras Cooperativas, en Show CDC Multimedios (General Roca, Río Negro).