“Este será un año duro para los productores de miel de monte natural, si bien tuvimos buena cosecha en San Luis, que superó las cantidades de años atrás, tenemos los precios atrasados, y no son en dólares, para el bolsillo es muy notable. Cotiza alrededor de 3 dólares, aunque en esta época siempre está un poco más abajo. Por eso el clima no será un problema”, dijo el ingeniero agrónomo, investigador de la Universidad Nacional de San Luis e integrante de la Cooperativa Apícola Río V Limitada en diálogo con el Diario de la República.

En este sentido, Cozzarín explicó que la principal preocupación es la inflación y cómo impacta en la compra de insumos: “Trabajar en 2022 fue muy duro porque la mayoría de los productores esperó que mejorara la coyuntura para comercializar la miel, pero no hubo un ajuste del dólar de exportación”.

También destacó “a la producción de soja se la subsidia con un dólar especial, bastante más arriba del dólar con el que liquidan a cualquier tipo de economía regional. Es una situación de injusticia bastante pesada”.

Por otro lado, resaltó cómo beneficia a las cooperativas la necesidad de las salas habilitadas para los productores que quieren exportar la miel. “Este es un sistema que funciona a pleno desde hace varios años y ha fortalecido a las cooperativas, porque los productores chicos para acceder a ese mercado formal tienen que trabajar con una sala habilitada”, dijo el cooperativista.

Sobre el 2023, Cozzarín anticipó que este año habrá un retraso de la cosecha por la situación climática: “Hay que tener mucho cuidado. La recomendación de la que hablamos dentro de la cooperativa es no demorar los tratamientos sanitarios, particularmente el de barroa, que justamente tiene un crecimiento exponencial a partir de finales de febrero y que cuando los productores demoran el momento del tratamiento por cuestiones de calendario, esas colmenas se tratan tardíamente y eso tiene un impacto muy fuerte sobre la invernada de las colmenas, por la cantidad de virus que este ácaro inocula y pone en juego la supervivencia de las abejas”.

Además, dijo que actualmente cuentan con tratamientos sanitarios con productos orgánicos: “Históricamente, los productores esperamos la cosecha y después hacemos tratamiento porque los productos que usamos pueden contaminar la miel. Contamos con productos orgánicos, como el ácido oxálico en diferentes soportes y puede aplicarse antes de que termine la mielada”.

Fuente: El Diario de la República.