“Un ingenio azucarero bien al norte de la provincia, uno de los últimos que quedaba en la cuenca. En su momento, hubo tres ingenios y el último que quedó fue el de Las Toscas que en 2018 se declaró a quiebra y no operó más. Al quedar mucha mano de obra calificada del taller del ingenio, decidimos formalizarnos como para juntarnos y ayudarnos entre todos juntos hasta llegar a este sistema cooperativo, que era nuevo para nosotros porque siempre trabajamos en fábrica, de forma dependiente. Ahora el trabajo lo tenemos que hacer nosotros y la remuneración es algo que tenemos que repartir entre nosotros. Para eso tuvimos que capacitarnos, capacitar a los compañeros para que esto siga”, comentó el presidente de la Cooperativa de Trabajo Construyendo Futuro Ltda., Javier Ávalos.

Cada comienzo de año es diferente en lo que respecta a la gestión de la empresa: “En su momento, cuando se creó la Cooperativa, fue antes de la pandemia y luego quedó en stand by por lo que ya conocemos. Ahora volvimos de nuevo, el año pasado arrancamos bastante bien, y este inicio de año fue bastante difícil para nosotros porque los precios no quedaban, hacíamos tubos para alcantarillarlo con un moldecito y ya no sabíamos el tema de los insumos, hacíamos el cálculo para venderlos. Fue una cuestión de sentarse y ver todas las cuestiones de vuelta, bastante complicado y duro”.

Quienes forman parte de la Cooperativa Construyendo Futuro decidieron quedarse a pelearla en su tierra, a diferencia de otras personas que los precedieron: “Tenemos la experiencia de los pueblos vecinos. Estamos casi a 40 kilómetros de los pueblos forestaleros de Villa Guillermina y Villa Ana, que fueron pueblos pujantes en su momento, y después quedaron como pueblos fantasmas. El historial no es favorable para la gente que se fue porque se fue y se engrosó las villas de emergencia en las grandes capitales, no le fue bien a la gente. Casi todos somos personas de 40 años de edad, fuera del sistema y decidimos quedarnos acá y pelearla acá. Tenemos nuestras familias e hijos y queremos seguir apostando por este lugar, no queremos irnos como la gente de los pueblos vecinos”.

“Hoy somos cerca de unas 25 personas, de las cuales estamos activas todos los días unas 12, 13. A los demás compañeros se los solicita cuando hay algo para hacer. Acá en la ciudad de Las Toscas en los últimos días se había anunciado de parte del gobierno provincial la construcción de un polideportivo municipal, y estamos conversando para que nos den trabajo, a ver si podemos entrar a alguna licitación y darles trabajo a los compañeros. No nos dijeron que no, tenemos muchas posibilidades”, concluyó.

Fuente: Elaboración propia a partir de entrevista realizada por Radio comunitaria Ore Tape (Benito Juárez, Buenos Aires).