En la localidad cordobesa de San Francisco alcanzan ese nivel de trabajo con el apoyo de organizaciones sociales a un grupo de recuperadores urbanos.

El galpón de la Cooperativa de Trabajo La Virgencita Ltda. aparece abarrotado de fardos de cartones y papeles y de lunes a viernes por las tardes se forman colas entre los recicladores que se acercan a vender todo lo que juntaron durante el día.

Emilio Amé, integrante de la Comisión Directiva de Cáritas Diocesana de San Francisco, confió que a más de un año de haber arrancado con la Cooperativa “el proyecto ha superado las expectativas”.

“Hoy un año después seguimos con la misma cantidad de familias que nos vienen a vender el cartón aunque se han agregado algunos, lo que sí tenemos son muchos más habituales diariamente. Tenemos un promedio diario de 1500 kilos de cartón y papel. Lo que recolectábamos antes en un mes lo estamos haciendo en una semana, prácticamente”, sostuvo. En 2019 procesaron y compactaron 105 toneladas de cartón y papel.

Según el integrante de Cáritas, “hemos logrado ya que muchos negocios o empresas los esperen -a los recolectores- y separen el material a reciclar, se lo guardan para que lo pasen a buscar, en ese sentido la comunidad va ayudando y generando algo de consciencia”.

La Cooperativa todavía se centra en la recolección de cartón, papel blanco y de color. Para Amé sería importante la separación diferenciada de residuos no solo para contribuir con los cartoneros, sino aún más importante para colaborar con el medioambiente.

Fuente: El Periódico.