Se inauguró de manera oficial el nuevo molino yerbatero de la Cooperativa Agropecuaria y de Consumo Limitada El Colono, asociada a la Federación de Cooperativas Federadas Limitada (Fecofe) y ubicada en la localidad de Campo Ramón, Misiones.

La concreción del molino pudo realizarse luego de que Fecofe presentara el proyecto en el Programa Sembrar Soberanía Alimentaria, una herramienta de financiamiento impulsada por el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación que propicia el fortalecimiento de procesos organizacionales y de gestión de las unidades productivas vinculadas al sector alimenticio.

Previo a la inauguración de este primer molino, la Cooperativa debía pagar a una empresa privada por el servicio de molienda y envasado. Esto implicaba, además, otros inconvenientes relacionados con los costos, tiempos de traslado y la pérdida de calidad de la materia prima. Así, la incorporación de este nuevo equipo marcará un antes y un después en la Cooperativa misionera, significando un paso adelante en el fortalecimiento de la producción local y la creación de puestos de trabajo en la zona. Será, también, una evidencia de que el cooperativismo como herramienta de desarrollo económico es viable.

Del acto de inauguración participaron el presidente de la Cooperativa, Carlos Biechteler, y el presidente de Fecofe, Juan Manuel Rossi. También asistieron miembros de la comunidad, el subsecretario de Planificación, Extensión y Programas de Financiamiento Rural del Ministerio del Agro y la Producción de Misiones, Martín Ibarguren, y el vicepresidente del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), Ricardo Maciel.

“Este año la Cooperativa cumple 25 años. La visión y la unión de los pioneros y fundadores hoy da sus frutos. Nos sentimos muy contentos por este logro. Estamos convencidos de que el camino es el agregado de valor, la industrialización de la ruralidad, para que nuestros hijos se puedan quedarse a trabajar acá en el pueblo”, sostuvo Biechteler.

“Esto demuestra el desarrollo federal de Fecofe, impulsando este proyecto en una provincia tan próspera como Misiones. Marca, además, la importancia que tiene la organización de los pequeños y medianos productores de la yerba mate”, expresó Rossi. Y agregó: “La producción debe estar en manos de esos productores, fomentada y articulada a través de la organización cooperativa, el Estado nacional y los gobiernos provinciales”.

A partir de ahora, la molienda de la yerba mate “Grapia Milenaria” se hará en molino propio, ubicado en el mismo predio donde la Cooperativa tiene su secadero, sobre ruta provincial número 103, a un kilómetro del acceso a Campo Ramón. En consecuencia, la empresa de economía social tendrá el control del producto desde la cosecha, pasando por la molienda hasta el envasado, en el marco de un fin más amplio que implica propiciar la industrialización y el agregado de valor en origen de la yerba mate de hoja verde.

Historia de El Colono

La Cooperativa El Colono fue formada en 1997 e integra el Consorcio de Cooperación Esperanza Yerbatera. Logró sobrevivir a diversas crisis económicas durante más de 25 años. En ese marco, la fidelidad de sus asociados y asociadas hizo que hoy la entidad mantenga una base firme, que logró sostenerse en los momentos difíciles. Su nombre remite a quienes iniciaron el desarrollo en la tierra colorada con la yerba mate. En cuanto a su producto final, la yerba Grapia Milenaria, se refiere a uno de los árboles nativos más sobresalientes de la Selva Misionera.

La empresa autogestionada involucra a 60 familias asociadas y tiene como objetivo a largo plazo que las próximas generaciones puedan continuar con la actividad en mejores condiciones. “El proyecto involucra a productores pequeños, con no más de 10 hectáreas. En esa superficie, además de yerba mate, realizan otras producciones como té, ganadería, maíz, poroto, mandioca”.

La Cooperativa tiene un compromiso con el medio ambiente y trabaja por un modelo de producción que tenga presente el cuidado de arroyos, suelos y montes. Ellos mismos tienen un vivero donde producen los plantines libres de productos químicos. También su secadero funciona con un sistema tradicional de secado con leña de madera implantada, evitando el uso de agrotóxicos. Con la instalación del Molino proyectan también agregar un pequeño laboratorio para analizar, ellos mismos, la calidad de su materia prima.

Según expresó el presidente de la entidad a una nota desarrollada para el Instituto Nacional de la Yerba Mate, desde Misiones la yerba llega a “Córdoba, Mendoza, Buenos Aires, Mar del Plata y La Plata, con poco volumen, pero con clientes fieles, que vuelven a comprar porque les gusta y saben que nuestra yerba es agroecológica”.

Fuente: Prensa Fecofe.