La Cooperativa de Servicios Públicos y Sociales de Serrano Limitada implementó este año el Relevamiento Social Comunitario (ResCom) propuesto por la Fundación Colsecor y fueron estudiantes del Instituto San Alberto y San Enrique quienes realizaron la recolección de datos.

La experiencia es la primera de este tipo en los tres años que lleva el ResCom y es también la primera vez que el trabajo de campo se realizó en el marco de la currícula, por jóvenes que además integran una Cooperativa escolar.

“Fue un proyecto que los involucró mucho. El trabajo de campo fue colaborativo, los chicos se dividieron en grupos y cada grupo abordó un formulario diferente. Buscaron información en diferentes instituciones y a través de varias fuentes como el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), el municipio local y la Cooperativa de servicios públicos”, explicó la docente guía, María Laura Echavarri.

Detalló, además, la utilidad de la información para los y las estudiantes: “Observaron la diversidad de ocupaciones, detectaron que hay mucha gente que trabaja por cuenta propia y que tiene emprendimientos que por ahí no son tan conocidos. También determinaron las profesiones que hay y buscaron hacer un análisis de qué porcentaje de alumnos que se recibe vuelve al pueblo a prestar sus servicios profesionales. En salud, vieron la importancia de contar con mayores prestaciones en el pueblo”.

Además, teniendo en cuenta que es un año electoral, realizaron una actividad donde conformaron agrupaciones políticas y el armado de plataformas electorales. De esta forma, generaron propuestas tanto en el ámbito local como regional basándose en las necesidades y problemáticas detectadas en base a la información del ResCom. “Ahora planean solicitar una reunión con el Concejo Deliberante local para presentar estas iniciativas y ver si en la medida de lo posible pueden ser consideradas”, finalizó Echavarri.

Canasta Básica Alimentaria

En octubre, la Fundación Colsecor presentó el informe de la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que busca generar información y profundizar en el conocimiento de las realidades locales. Entre otros datos, indica que una persona adulta necesitó $9.539 para no cruzar la línea de indigencia.

La información surge del relevamiento en 44 localidades del país distribuidas en siete provincias y que cuentan con el respaldo de las Cooperativas de servicios públicos locales.

El dato promedio de lo que necesitó una persona adulta para no ser indigente en octubre marca un aumento del 2,2 % en relación a septiembre. En tanto, una familia de cuatro integrantes necesitó $29.475 para comprar alimentos básicos.