Un grupo de mujeres de Ushuaia lleva adelante un emprendimiento para aportar valor agregado a la lana obtenida de las ovejas de la zona, apostando a generar empleo.

“Hacemos madejas de lana, producimos prendas tejidas en diferentes técnicas -ya sea telar, tejido en dos agujas, crochet, fieltro- y ahora estamos dando los pasos para conformarnos cómo una cooperativa, que sería la primera de este tipo en la provincia”, destacó Norma Enriquez, integrante de la incipiente Cooperativa Fibras del Fin del Mundo, de la austral Ushuaia.

En diálogo con el El Portal de las Cooperativas contó que son “un grupo de mujeres que venimos trabajando desde 2012, acompañadas del gobierno que nos ayuda y nos va abriendo puertas para que podamos avanzar en este proyecto, utilizando lana de oveja de las estancias locales”.

La mujer señaló que, junto con las madejas, también producen “diferentes prendas como gorros, ponchos, pashminas, ruanas, sweaters, chalecos y todo lo que se pueda trabajar con lana de oveja; en diferentes técnicas como fieltro, telar, dos agujas o crochet”. Señaló que son “un grupo que se fue perfeccionando en lo que son las técnicas, porque somos algunas oriundas de Salta, Jujuy, Chile y otros lugares”.

Confirmó que “si bien había mujeres que en forma aislada hacían esto, nunca se hizo así como grupo y a través de una Cooperativa”. Aseguró que de esta forma “se puede lograr un desarrollo mucho más avanzado, por ahí antes la gente se llevaba la lana, pero no se podía ver el producto terminado. Por lo general la lana se exporta en bruto desde Tierra del Fuego, ahora vamos a poder mostrar lo que se puede hacer con ese producto fueguino”, destacó.

Contó que son “las primeras veces que mostramos nuestros productos terminados, hemos estado en distintas ferias en la provincia, también en Buenos Aires, en Córdoba; hoy estamos pudiendo mostrar lo que hacemos”, remarcó Enriquez.

Dijo que por el momento son seis mujeres las que forman parte del proyecto y se encuentran realizando los trámites correspondientes para conformarse legalmente como Cooperativa, pero tienen “la idea de ir sumando mujeres de la provincia que también trabajen como nosotras, para que sean parte de nuestro emprendimiento”.

Para terminar expresó “creemos que conformarnos hoy como cooperativa es la mejor decisión, para poder continuar generando trabajo a  través de nuestra materia prima local y poder salir hacia afuera presentando un producto netamente fueguino. Apostamos a crecer mucho más  con esta iniciativa. Realizamos todo el proceso, desde la lana recién esquilada hasta llegar a la madeja o prenda terminada, todo hecho en forma artesanal”, concluyó la emprendedora fueguina.