De acuerdo con un informe presentado en la Asamblea de la Alianza Cooperativa Internacional (Alianza Cooperativa Internacional), estimativamente 1.217 millones de personas están involucradas en este tipo de organizaciones.

Sobre la base de datos de 156 países, la estimación actualizada muestra que el empleo en o en el marco de las cooperativas afecta al menos a 279,4 millones de personas en todo el mundo, es decir, 9,46% de la población ocupada mundial.

El informe mundial (descargar aquí) elaborado por Cicopa a fines de 2017, concluye que el movimiento cooperativo está compuesto por uno de cada seis habitantes del planeta, donde viven unas 7.350 personas, según el último relevamiento demográfico de Naciones Unidas.

Durante la Conferencia Global realizada el 17 de noviembre en Kuala Lumpur, Malasia, la Alianza Cooperativa Internacional y el instituto europeo Euricse también dieron a conocer el Monitor Mundial Cooperativo.

Allí revelaron que las 300 cooperativas principales están distribuidas en 27 países y facturan unos 2,16 billones de dólares, principalmente en las ramas de seguros y de industrias agrícola y alimentaria.

Informe de Cicopa

El empleo es una de las contribuciones más importantes de las cooperativas en todo el mundo. Este informe tiene en cuenta las iniciativas y los debates internacionales sobre los temas del futuro del trabajo y del mundo del trabajo en evolución, y tiene por objeto actualizar el estudio de 2014, Cooperativas y empleo: un informe mundial:

1 – actualizando la información cuantitativa sobre el empleo cooperativo a nivel mundial;

2- presentando propuestas para elaborar herramientas conceptuales que produzcan información fiable sobre el trabajo y el empleo en las cooperativas;

3- examinando la contribución de las cooperativas al trabajo y al empleo en el marco del empleo informal y de las nuevas formas de trabajo.

El informe propone un método pragmático que utiliza las tipologías cooperativas como proxy y destaca información sobre diferentes formas de empleo cooperativo. El elemento clave del método consiste en reclasificar los tipos de cooperativas que se utilizan actualmente de acuerdo con los meta-tipos que representan diferentes formas de empleo cooperativo, es decir, los empleados, los miembros trabajadores y los miembros productores. Proponemos seis meta-tipos, a saber, “cooperativa de usuarios”, “cooperativa de productores”, “cooperativa de trabajo asociado”, “cooperativa de segundo grado” y “cooperativa de empresas” según la relación de los miembros con su cooperativa.

Sin embargo, aparte algunos problemas técnicos que podrían resolverse obteniendo información más cualitativa sobre las tipologías actualmente utilizadas, una serie de cuestiones conceptuales deberían debatirse más a fondo, como la distinción entre cooperativas de productores y cooperativas de trabajo asociado, las definiciones estadísticas del trabajo asociado, y las cuestiones de fronteras relacionadas con el empleo en las filiales de cooperativas y con las empresas-miembros en las cooperativas de empresas.

Utilizando la metodología propuesta y teniendo en cuenta los problemas planteados, el informe presenta una actualización de la información cuantitativa sobre el empleo cooperativo, así como sobre el número de cooperativas y los tipos de miembros. Sobre la base de datos de 156 países, la estimación actualizada muestra que el empleo en o en el marco de las cooperativas afecta al menos a 279,4 millones de personas en todo el mundo, es decir, 9,46 % de la población ocupada en el mundo. De ellos, 27,2 millones trabajan en cooperativas, incluyendo alrededor de 16 millones de empleados de cooperativas y 11,1 millones de trabajadores asociados. El empleo cooperativo, integrado principalmente por miembros-productores independientes, involucra a más de 252,2 millones de personas, la gran mayoría en la agricultura. El número de cooperativas en todo el mundo es de 2.94 millones y el número de miembros en todos los tipos de cooperativas es de 1.217,5 millones.

Con respecto a los aspectos cualitativos del empleo cooperativo, el informe examina las contribuciones específicas de las cooperativas para abordar cuestiones relacionadas con el trabajo y el empleo en el marco de la economía informal. El informe subraya la importancia de un enfoque integrado basado en la participación de múltiples partes interesadas, y sugiere que las cooperativas deberían formar parte de este enfoque integrado de varias maneras:

• Las personas que trabajan en la economía informal, que se unen a cooperativas de ahorro y crédito, cooperativas de seguros mutuos, cooperativas polivalentes y cooperativas de consumo, tienen acceso a ciertos servicios formales o semi-formales, y benefician de tal forma de los arreglos formales que necesitan en su vida y trabajo. Estas cooperativas pueden facilitarles el acceso al crédito, la educación y la formación, bienes y servicios asequibles para satisfacer sus necesidades básicas, así como un cierto nivel de protección social basado en la solidaridad y la asistencia mutua.
• Los productores / empresarios independientes que se unen a cooperativas de servicios compartidos basados en una estrategia de integración horizontal tienen acceso a diversos servicios que apoyan las actividades económicas de los miembros, les ayudan a lograr economías de escala y una mayor capacidad de negociación.
• Para autónomos y freelancers que han aumentado significativamente en las últimas décadas, las cooperativas podrían ser utilizadas por sindicatos o organizaciones con miembros como una herramienta para organizarlos, pero también proporcionar modelos innovadores que garantizarían flexibilidad y protección.
• Las cooperativas de trabajo asociado, cuyo objetivo es proporcionar empleo decente a sus miembros trabajadores, pueden ser una solución directa a la formalización del empleo informal. Sin embargo, para mostrar plenamente sus contribuciones potenciales, necesitan un ambiente de apoyo y un marco legal apropiado.

Además, este informe presta especial atención a la posible contribución de las cooperativas al desarrollo tecnológico ya los cambios sociales que lo acompañan. En el mundo del trabajo que cambia rápidamente, las cooperativas deben responder a nuevas oportunidades y desafíos. Los conceptos de “plataform cooperativism” y “comunes” podrían anunciar formas innovadoras de trabajar en y con las cooperativas en el siglo XXI. Sin embargo, si bien se reconoce plenamente la contribución de estos nuevos conceptos, este informe propone su combinación con las herramientas y los métodos del movimiento cooperativo, lo que fortalecería y demostraría concretamente su posible contribución a la solución de los problemas vinculados al empleo y al trabajo en el mundo del trabajo en mutación.

Fuente: La Gaceta de Cooperar y Cicopa.