El sueño de la casa propia se hizo realidad para 30 familias, que recibieron la suya en un plan de viviendas que pueden abonarse entre 180 y 220 cuotas, y su costo se ajusta al índice del Salario Mínimo Vital y Móvil.

En el año 2011, un grupo de vecinos y vecinas se reunieron para poner en marcha una inversión que les cambiaría la vida no sólo a ellos, sino a muchas personas de Lujan. El afán de poner en marcha una Cooperativa de construcción de viviendas los llevó a crear la “10 de agosto” -nombre popular de la Cooperativa de Vivienda y Consumo 10 de Agosto Ltda.-, y a demostrar que “a través de la economía social es posible materializar los derechos”.

La secretaria de la entidad, Evangelina Pirroncello, brindó detalles de cómo viene trabajando la Cooperativa, y señaló que desde hace nueve años el proyecto continúa siendo el desarrollo de la Cooperativa en Luján. “Nuestra misión fue siempre la misma. Desde que iniciamos nuestro objetivo es continuar realizando las primeras unidades de viviendas”, expresó.

En este marco, destacó que, actualmente, la Cooperativa 10 de Agosto cuenta con 110 socios y, en el comienzo, la entrega de casas fue paulatina. “Al principio hacíamos pocas, pero ahora estamos haciendo unas ocho viviendas por año, y este año venimos con buenas expectativas por lo que consideramos que vamos a poder superar esa cantidad”, manifestó la integrante del Consejo de Administración.

A partir de una resolución, las viviendas pueden abonarse entre 180 y 220 cuotas, y el índice de actualización de la cuota es en relación al incremento del Salario Mínimo Vital y Móvil.

Sobre este punto, la cooperativista detalló que “con ello nos garantizamos de que socios y socias puedan pagar las cuotas, entendemos que es una cláusula transparente para que puedan acceder todos los trabajadores”.

“A través del trabajo y del esfuerzo de todos los socios, la entidad creció muchísimo y además de construir las unidades de viviendas hemos logrado conformar un barrio y ser comunidad”, expresó con suma alegría.