La Cooperativa de Consumo y Vivienda Mercosol Ltda., ubicada en Río Cuarto (Córdoba), promueve desde 2015 el acceso a alimentos de calidad a un precio justo. Uno de los integrantes de esta Cooperativa, Santiago Armitano, compartió la historia y los desafíos que enfrentan.

La filosofía de Mercosol se centra en el concepto de “precio justo”, que va más allá de simplemente ofrecer productos baratos. Según el cooperativista, el precio justo es aquel que es equitativo tanto para el productor como para el consumidor. “No se trata de regatear el precio al productor, ya que su trabajo tiene un valor que debemos respetar. Por otro lado, como Cooperativa, no buscamos generar grandes riquezas, sino garantizar los medios de vida de quienes trabajamos en ella”, explicó.

Este enfoque permite que Mercosol funcione como un espacio de militancia en torno al acceso a alimentos de calidad, a través de la organización cooperativa. Con cerca de 750 socios, la cuota social inicial es de $2, lo que permite a cualquier persona sumarse a este proyecto.

La Cooperativa Mercosol comenzó su actividad mucho antes de obtener su matrícula oficial en 2016. “Nos iniciamos participando en ferias locales y, en 2018, abrimos nuestro primer punto de venta: el Almacén Cooperativo”, recordó el trabajador. Recientemente, el almacén se trasladó a la calle Bolívar, consolidando su presencia en la comunidad.

A pesar de los desafíos, la Cooperativa ha mantenido un crecimiento constante. Armitano destacó que, aunque muchas cooperativas han cerrado debido a la falta de apoyo estatal, el modelo de asociación solidaria sigue siendo una alternativa viable para garantizar empleo en un mercado laboral precarizado. “La autogestión cooperativa puede ser una salida en estos contextos de crisis, donde el asociativismo se convierte en una herramienta para acceder a puestos de trabajo”, comentó.

Mercosol trabaja en estrecha colaboración con productores locales y otras cooperativas para garantizar la calidad y accesibilidad de los productos. Entre sus principales socios se encuentran la Cooperativa Soberana, que produce pastas y productos lácteos, y diversos productores agroecológicos de la región. “Nuestra idea es eliminar a los intermediarios para que los productos lleguen al consumidor lo más económicos posible”, señaló.

Un ejemplo de este enfoque es la colaboración con un productor local de stevia, quien ha logrado desarrollar este cultivo en Río Cuarto a pesar de las dificultades climáticas. “Es un avance significativo que demuestra cómo, con esfuerzo y cooperación, podemos superar los obstáculos”, añadió.

Sobre el panorama para las cooperativas en Río Cuarto y en Argentina, Armitano se mostró optimista sobre el potencial de crecimiento del sector cooperativo: “A nivel provincial, se han lanzado iniciativas como el Ministerio de Mutualismo y Cooperativismo, aunque todavía falta mucho para que se materialicen en apoyos concretos”.

Fuente: Elaboración propia a partir de entrevista realizada por Radio Gospel (Río Cuarto, Córdoba).