“La economía popular y sus movimientos organizados, el cooperativismo y la agricultura familiar serán también actores centrales de estas políticas públicas”, expresó el mandatario en su primer mensaje a la Asamblea Legislativa.

Luego de la jura como presidente de la unidad de todos los argentinos y las argentinas, Alberto Fernández se dirigió al conjunto de senadores y diputados de la Nación, en un recinto colmado en el que se destacó la presencia de su gabinete en pleno, gobernadores, integrantes del Poder Judicial e invitados especiales.

“Vengo a convocar a la unidad de toda la Argentina en pos de la construcción de un Nuevo Contrato de Ciudadanía Social. Un contrato social que sea Fraterno y Solidario. Fraterno, porque ha llegado la hora de abrazar al diferente. Solidario, porque en esta emergencia social, es tiempo de comenzar por los últimos, para después poder llegar a todos. Este es el espíritu del tiempo que hoy inauguramos”, propuso al inicio.

Poco más de una hora tardó en la lectura de su discurso que tuvo altos momentos emotivos. El presidente planteó con convicción el final de una etapa de privilegios y de utilizaciones sesgadas del estado a favor de unos pocos.

Planteó las bases del federalismo para todo su mandato, y aseguró: “Vamos a poner a la Argentina de pie, con una infraestructura federal de calidad, sostenible y sustentable, promoviendo el desarrollo regional y creando juntos miles de puestos de trabajo en cooperativas de servicio, pequeñas y grandes empresas”.

En el cierre planteó grandes desafíos a manera de preguntas: “¿Seremos capaces, como Argentina Unida, de atrevernos a construir esta serena y posible utopía a la cual nos llama hoy la historia? ¿Seremos capaces como sociedad? ¿Seremos capaces como dirigentes?”, a lo que respondió: “Yo quiero ser el Presidente de la escucha, del diálogo, del acuerdo para construir el país de todos”.