La Fábrica de Prepizzas es un proyecto surgido desde la Dirección de Discapacidad de Lincoln. Se trata de una fuente de empleo genuino para personas con y sin discapacidad que elaboran productos de primera calidad.

El proyecto productivo La Fábrica de Prepizzas, coordinado por la dirección de Discapacidad municipal de Lincoln, adquirió la personería jurídica y se formalizó como Cooperativa de trabajo, transformándose en una fuente de empleo genuino para personas con y sin discapacidad.

El emprendimiento inclusivo (que había iniciado sus actividades en marzo del 2019 y ha mantenido un crecimiento sostenido a lo largo del último año) obtuvo la figura legal que le ha permitido constituirse como Cooperativa de Trabajo La Fábrica de Prepizzas Limitada.

En ese marco, el intendente de Lincoln, Salvador Serenal, visitó la unidad productiva donde funciona la entidad, y remarcó que, en este contexto de pandemia, “ésta es una grata noticia, un logro que es fruto del trabajo en equipo y un sueño que moviliza a familias, profesionales, trabajadores, empresas y a toda una comunidad, que tomó este proyecto como suyo”.

Además, el jefe comunal sostuvo: “La figura de Cooperativa va a hacer posible que este proyecto pueda seguir creciendo, sume más integrantes y se consolide, basándose en la economía social, inclusiva y solidaria”.

En tanto, desde la Dirección de Discapacidad celebraron el crecimiento y la formalización de esta iniciativa. “La Fábrica de Prepizzas es un claro ejemplo de trabajo colectivo de muchas personas con y sin discapacidad que hoy, más que nunca, apuestan al crecimiento y al acompañamiento local”, indicaron.

El equipo de trabajo está integrado por nueve personas, quienes diariamente producen prepizzas, las cuales son comercializadas en más de veinte comercios de Lincoln y la zona. “Ser Cooperativa habilita a una mayor comercialización del producto y nuevas oportunidades laborales para personas de la comunidad”, pronunció el director de Discapacidad, Germán Martínez. También destacó que el crecimiento del proyecto “fue posible a partir de las alianzas establecidas con empresas como Molinos Tassara SA y Fundación Cargil, que acompañaron la labor diaria de un grupo de trabajo sólido, con objetivos definidos, que responden a la esencia del cooperativismo”, de acuerdo con lo que argumentó.