La siguiente nota tiene como epicentro la ciudad entrerriana del Concepción del Uruguay. Es que Río de los Pájaros Cooperativa Apícola Limitada informó a la ciudadanía de la región, que en caso de tener un enjambre en su vivienda no procedan a su eliminación, sino que los llamen para que ellos las rescaten. Esta iniciativa podría ser aplicable en cualquier punto del país ya sea con una cooperativa apícola o un apicultor de su propia región.

Lo que proponen en La Histórica

Con la llegada de la primavera inicia la aparición de enjambres de abejas en las zonas urbanas, de encontrarse alguno cerca del domicilio solicitan que se comuniquen con Río de los Pájaros, quienes lo retiran -si es posible- de manera gratuita y sin lastimarlas.

Con la llegada del calor, las colmenas aceleran su actividad, las poblaciones de abejas se multiplican rápidamente y el espacio interior de las colmenas se llena de alimentos, crías y obreras; y es en ese entonces cuando comienzan a esparcirse los enjambres.

Control de las abejas

Por regla general, las abejas hacen el enjambre en lugares altos, aunque se han dado casos de que han llegado a anidar en el acerado. Normalmente se instalan en cornisas, fachadas de edificios, árboles. El enjambre debe ser retirado por personal especializado, debido a la peligrosidad de las picaduras cuando molestamos el enjambre y por ser una especie protegida.

Una vez que se ha retirado el enjambre, se fumiga la zona con productos repelentes que impiden la reconstrucción del enjambre. Se promueve el traslado del enjambre antes que la eliminación del mismo, cuidando así el medio ambiente y respetando la importancia para el ecosistema.

¿Qué hacen con los enjambres?

“En primer lugar tratamos de rescatar los enjambres para evitar inconvenientes, porque mucha gente genera un problema mayor intentando quemarlas o echarle veneno, etc.”, explicó a El Portal de las Cooperativas el integrante de la cooperativa apícola, Alcides Parlatto.

Al ser consultado si servían esos enjambres para sumarlos a sus colmenas aclaró: “Pueden llegar a servir, aunque muchas veces hay que cambiarles la reina por una más dócil”.

Y por último informó que “durante octubre y noviembre principalmente es la época de enjambrazón por lo que hace unas semanas que mucha gente está requiriendo de nuestros servicios, y cumplimos siempre que sea posible porque a veces se instalan en una pared, o entre el techo y el cielorraso de una casa o en el hueco de un árbol y resulta imposible rescatarlos. Ante esa situación, lamentablemente hay que eliminarlas, pero ese trabajo no lo hacemos nosotros. Sugerimos a un profesional que tengan los elementos y productos aptos para ese fin”.