Entre otros puntos serán protegidas de las fumigaciones.

A principios de noviembre el gobernador Gustavo Bordet promulgó una norma muy esperada por el sector apícola entrerriano al declarar de interés la actividad, y definir a la abeja melífera como “bien social” que deberá ser protegido, lo mismo que a la flora apícola cuya biodiversidad debe ser promovida.

La Cámara de Diputados de Entre Ríos sancionó la Ley Nº 10831 que define que el organismo de aplicación será el Ministerio de Producción de la provincia, el cual deberá mantener en permanente actualización el Registro Provincia de Apicultores creado por esta misma ley.

“¿Eso significa que las protege de las fumigaciones?”, consultó El Portal de las Cooperativas al productor apícola e integrante de Río de los Pájaros Cooperativa Apícola Limitada de Concepción del Uruguay, Alcides Parlatto. “Al menos ese es el espíritu”, aseguró, para luego ampliar: “Nosotros veníamos proponiendo algunos puntos entre ellos la creación de un fondo rotativo de apoyo para todo el sector apícola”.

Ese fondo referido por Parlatto estará conformado por la partida que se destine en el presupuesto provincial, los recursos provenientes de ley y/o programas especiales de Nación y lo obtenido mediante multas por infracciones a esa ley.

Destacó que se lo declare a la abeja como “ser social” porque “le da una importancia que no tenía hasta ahora, siempre teníamos que remar contra la corriente y no teníamos apoyo prácticamente, era muy poco”.

El apicultor comentó cómo consiguieron convencer al Gobernador para que impulse esta ley: “En un congreso mundial que se hace cada dos años en Canadá, el único gobernador argentino que participó fue Bordet, entonces el presidente de la Federación Apícola le comentó toda la importancia que tiene para la provincia, somos la segunda en el país en cantidad de producción y podríamos mejorar bastante. Él vio la importancia que tenía y se puso en conexión con el sector. También habíamos pedido que se desgravara impositivamente a aquellos campos que permitan el ingreso de colmenas, porque el 80 o 90 por ciento de la gente que tiene campos es media reacia a darte un lugar para tener abejas, pero creo que eso no cuajó”, lamentó.

La normativa indica, ente otros puntos, que deberán realizar inspecciones en colmenares, para que las instalaciones mantengan un funcionamiento y mantenimiento sanitario adecuado para evitar contagio de plagas o enfermedades; y controlar el efectivo cumplimiento de la norma legal.