La Cooperativa de Trabajo Agroindustrial Tilisarao Ltda. busca concretar en 2024 la producción de nuevos alimentos a través de su usina láctea propia. Fabio Lucero, integrante de la organización, adelantó que comercializarán dulce de leche, yogurt, leche en sachet y tres variedades de queso desde marzo y abril.

“Ya tenemos el galpón principal, la sala principal está terminada, nos están faltando los sanitarios y la sala de maduración de quesos. Después ya estaríamos, las máquinas ya las tenemos acopiadas en un galpón. Esta será otra unidad de negocios”, contó.

Por otro lado, también relató que al complejo productivo y laboral le sumarán un mercado de cercanía, crianza de pollos e incorporarán en los próximos meses gallinas ponedoras. “Nosotros trabajamos con las universidades, con Senasa y con el INTA para darle trazabilidad a nuestros productos. Cada vecino que consume nuestra producción está controlado”, expresó.

Buscan convertirse en punto clave de la economía regional

La Cooperativa mantiene vínculos con universidades, institución de formación y académicos que les permiten mejorar el trabajo dentro y fuera de la organización.

En este sentido, por ejemplo, Lucero relató que la Universidad Nacional de San Luis, a través de su Facultad de Ingenieros en Alimentos y la Facultad de Química y Bioquímica controla la calidad de las aguas. También se suma el trabajo en conjunto con la Facultad de Veterinaria y la Facultad de Derecho. La Facultad de Ciencias Económicas “nos ayuda a capacitar nuestra gente para que administrativamente puedan ellos mismos gerenciar la cooperativa con los conocimientos que hay que tener”.

En esa línea, en 2024, Conicet realizará un relevamiento territorial para conocer la situación de los pequeños productores de la zona. “Queremos transformarnos paulatinamente en eje del desarrollo de nuestra economía regional. Queremos poder incentivar a otros productores pequeños de cabritos, de cerdos, de gallinas, de pavos, de frutas y de verduras a que tengan un mercado de cercanía, donde ellos no tengan que andar callejeando para vender un cabrito, sino que saben que, si crían 10 cabritos, la cooperativa se los va a comprar y si tienen huevos caseros, van a traer y la cooperativa se los va a comprar”, contó.

Sobre la apuesta al trabajo que realizan desde 2017, Lucero resumió: “Tenemos un plan, producimos comida, apostamos a la Argentina productiva, apostamos al trabajo genuino y a la producción de alimentos para todos nuestros hermanos y hermanas a un precio razonable, que no falte ni leche, ni verduras, ni carne, ni frutas en las mesas de los argentinos”. Y agregó: “Queremos hacer un trabajo social con los pequeños productores para que ellos se queden, o sea, trabajamos en el arraigo rural. Que ellos se queden a producir alimentos y no se tengan que venir a la ciudad y después terminar engrosando el cinturón de pobreza en las grandes urbes”.

Fuente: Elaboración propia a partir de entrevista realizada por FM San Alfonso (Yerba Buena, Tucumán).