El laboratorio Roux Ocefa fue recuperado por sus trabajadoras y trabajadores para convertirse en la Cooperativa de Trabajo Farmacoop Limitada. Después de seis años del anuncio del cierre, se reinventaron, dando respuestas a la pandemia por Covid-19.

Actualmente, cuentan con las áreas de tecnología médica, de productos cosméticos e higiene personal y de logística de medicamentos. Los últimos artículos elaborados fueron el test de Covid, un alcohol al 70% y en versión gel, y una crema hidratante.

En primera persona

“Los antiguos dueños habían roto los sectores para llevarse las maquinarias y el lugar estaba clausurado por la autoridad sanitaria. Entonces, nosotros fuimos quienes, durante todo el 2019 y parte del 2020, iniciamos un proceso de reconstrucción de dos plantas productivas totalmente destruidas”, explicó el presidente de Farmacoop, Bruno Di Mauro.

Una de las integrantes de la empresa cooperativa, Edith Pereira, recordó: “Entré a trabajar en el laboratorio en 1983, era muy jovencita y era mi primer trabajo, lo amaba y cuidaba mucho. Fue mucha tristeza darnos cuenta que la empresa nos había traicionado. Entonces, decidimos apoyar a algunos compañeros que querían pelear por su trabajo y hoy estamos felices de la vida, porque lo que conseguimos fue después de mucho esfuerzo”.

Aunque ya transcurrió algún tiempo desde que tomaron el control de las plantas, la trabajadora no deja de sorprenderse de que pueda ser ella quien tome las decisiones: “Pintamos estas paredes, todo lo que ves lo hicimos nosotros. Este es un proceso de mucho tiempo, donde venimos todos juntos, y es un largo camino, pero con mucho orgullo llegamos hasta acá”, señaló.

Decisiones favorables

Fue también importante contar con el apoyo del Estado para reconstruir el laboratorio que había quedado desarmado. Varias políticas públicas cambiaron el destino del laboratorio, entre ellas la creación de la Dirección de Empresas Recuperadas dentro del Ministerio de Desarrollo Social durante el mes de diciembre de 2019. En la misma línea, lo aportado por los programas Potenciar Trabajo y Manos a la obra, que hicieron posible la adquisición de maquinaria necesaria para poder producir.

En el 2020 cuando estaban por iniciar el proceso de habilitación de la parte de medicamentos, que era lo que históricamente hacían los laboratorios, empieza la pandemia y, por ese motivo, tuvieron que dar un giro en la estrategia de reactivación. A partir de ese suceso, comenzaron a fabricar otros productos de primera necesidad y durante el 2021 relanzaron una crema histórica de la antigua empresa llamada Aqualane.

“Nuestro objetivo es reactivar toda la línea de producción para dar la mayor cantidad de trabajo posible, para posicionarnos como un laboratorio que es capaz de competir en este mercado tan difícil que es la industria farmacéutica pero sobre todo, para saber que no dependemos ni de un cambio de gobierno, ni de un subsidio, sino que logramos la autonomía suficiente para lograr que esto siga funcionando”.

Producir desde el asociativismo

De Mauro y Pereira demuestran un gran compromiso con la empresa: “Creemos que tenemos una responsabilidad, pero también tenemos el orgullo de saber que esto lo hicimos nosotros, que todas las paredes que ustedes ven acá, los durlock que ven, las áreas que ven, todas las armamos nosotros con nuestras manos y la cuidamos como lo que es, nuestra casa”.

Con el deseo de que las familias continúen con la empresa: “Me gustaría saber que este proyecto no se termina con nosotros, creo que esto tiene que quedar para los que vengan después y tenemos que entregarle una empresa que esté trabajando al 100%”.

Fuente: Argentina.gob.ar.