La iniciativa surgió de una inquietud de integrantes del centro de estudiantes de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), con sede en la ciudad de Santa Fe, durante la gestión de la fotocopiadora de sus servicios y de los becados universitarios que son los que trabajan en ese espacio.

“Durante mucho tiempo el centro lo concesionaba con un privado que nos destinaba un canon con lo que se confeccionaban los fondos para las becas”, contó a El Portal de las Cooperativas el presidente de la Cooperativa de Trabajo Gráfica Obrero Estudiantil Ltda., José Cornaló.

Llegó la pandemia y con ello la digitalización del material de estudio, más la crisis económica hicieron bajar mucho el consumo de fotocopias, lo que afectó los ingresos para el centro, “el privado nos pedía aumentar el precio de las copias o reducir becarios, entonces nos llevó a organizarnos de otra forma más autogestiva, ahí surgió la idea de la cooperativa”, recordó.

La personería jurídica salió en noviembre de 2023, “la producción para este año aún no la iniciamos porque estamos esperando el comienzo de las clases”, contó.

No obstante ellos apuntan no sólo a lo que puedan generar dentro de la universidad porque el consumo de las fotocopias disminuyeron, “queremos llegar a otros negocios,a nuevos mercados de la ciudad, sectores, para que esta cooperativa gráfica sea redituable y se pueda sostener el trabajo de las personas a cargo de la fotocopiadora”, remarcó el estudiante de Sociología. Varios tienen experiencia en el trabajo de diseño gráfico.

Hoy son 6 los integrantes de la Cooperativa, todos son parte del centro de estudiantes. Una vez que la Cooperativa marche por sí misma la idea es que esos becarios se asocien.

Están agremiados dentro de la CTA y de la Red Mayo.

A futuro planean seguir con la cooperativa, tras los naturales recambios de autoridades,aún cuando ya sean egresados de sus carreras,”queremos que sea algo que se sostenga en el tiempo,no que sea coyuntural”.

“Es una novedad que como centros de estudiantes decidamos formalizarnos como cooperativa y transformar lo que en la mayoría de las universidades del país son becas de trabajo en fotocopiadoras, que son una forma laboral precarizada, en un asociativismo del que pueden acceder a un montón de beneficios de seguridad social, laboral, etc.” sintetizó con cierto orgullo.