“Se fundó cuando cinco chicas se autoconvocaron y hablaron con Ludmila Fernández (referente local del MTE)”, recordó la concordiense Andrea Celeste Faría, integrante de la Cooperativa de Trabajo Mundo Textil Ltda., que integra el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE).

La Cooperativa tiene en Concordia un punto de producción y desarrollo. Por medio de la organización político-social consiguieron la maquinaria y el taller que funciona en un local que alquilan. “Lo pagamos nosotras”, aclaró a El Portal de las Cooperativas.

Los subsidios a los que pudieron acceder les facilitó la compra de maquinarias, tela y realizar capacitaciones para sus integrantes.

Sobre las expectativas a futuro apuntan a que su taller sea industrial, “que podamos generar un buen stock. hoy en día nuestro fuerte es hacer y vender remeras”, contó.

La cooperativista manifestó que suelen presentarse a licitaciones “tratamos de hacer varias cosas, siempre tratamos que sea industrial más que nada”, insistió.

“Ahora mismo estamos haciendo 140 camperas de trabajo. También la vez pasada hicimos guardapolvos, bolsas para la municipalidad, para las maratones, chalecos reflectivos que usan los chicos que barren las calle o las cooperativas en general”, detalló.

Pero la expectativa de Faria como de sus compañeras es llegar a tener un sueldo digno, que llegue a lograr la canasta básica, y compartir el crecimiento incorporando más gente, “por la necesidad que hoy en día hay, hay muchas mujeres que necesitan y que pueden incorporarse a nuestro taller”.

Insistió en que sería interesante que la sociedad sepa el trabajo que hace el MTE “el lema de los costureros es ‘La casa para habitar y el polo para trabajar’, y esa es la meta de todas las chicas que están, que es lo que queremos, ir a trabajar en un espacio cómodo y seguro, de a poquito lo estamos logrando y se puede”.