Con 50 años de experiencia en la gestión social educativa, la Escuela Nueva Cooperativa de Trabajo Limitada encarna la lucha para el reconocimiento y respaldo de una ley que permita la continuidad de un proyecto cooperativo en la educación.

Desde sus inicios en 1972 se formó un proyecto político pedagógico disruptivo para el sistema educativo tradicional. La propuesta de la escuela es sentar las bases de las prácticas cooperativas en la primera infancia, pensando la educación en un sentido amplio que va más allá de los contenidos áulicos.

“Nosotres formamos parte de la asociación de escuelas de gestión social a nivel nacional, y también de la Federación de Escuelas de Gestión Social de la Provincia de Buenos Aires y la Ciudad de Buenos Aires y desde ahí luchamos para que se pueda promulgar la ley de gestión social de la educación , que es una parte de la ley nacional de educación que establece que la gestión social es una forma posible de gestionar la educación además de la estatal y la privada”, declaró la integrante de la Escuela Cooperativa Mundo Nuevo.

Los trabajadores y trabajadoras de la Cooperativa entienden que se necesitan generar las condiciones para que las escuelas de gestión social existentes (algunas conformadas como Cooperativas de trabajo y otras no), puedan fortalecerse y sobre todo para que estas prácticas con bases cooperativistas puedan ser más masivas.

“La idea de gestión social tiene que ver con un modo de pensar la educación más allá de la organización en términos legales de les trabajadores, tiene que ver con pensar las bases para otra economía, tenemos que poder cuestionar el sistema educativo que tenemos con una capacidad crítica propositiva, creemos que a cooperar se aprende, a vivir con otres se aprende”, manifestó la docente.

Romper con el sistema que promueve la meritocracia y el individualismo, que abona a la economía capitalista es fundamental para lograr otro tipo de sistema que promueva relaciones sociales y económicas solidarias.

“Para nosotres nuestro proyecto político pedagógico es indisociable de nuestra identidad como trabajadores y trabajadoras asociades en cooperativa. Todas las prácticas que hacen a nuestro trabajo, se ven reflejadas en el proyecto que llevamos adelante con les niñes todos los días. Los chicos y las chicas vivencian en la escuela, prácticas cooperativas todos los días, tiene asambleas de grado cada 15 días, donde trabajan cuestiones de convivencia donde ponen en común situaciones que son conflictivas o proyectos que quieren llevar adelante entre todo el grado”, detalló Merkier.

En la actualidad la Cooperativa está conformada por 74 trabajadoras y trabajadores que además de promover el ideal cooperativo en la educación, también luchan por adquirir el espacio físico que habitan como comunidad, “El edificio que nos contiene lo alquilamos durante muchos años, luego pudimos comprar con ingresos propios un sexto de la propiedad, pero los otros 5 sextos están en venta y necesitamos ser nosotres quienes lo podemos compren para darle continuidad a este proyecto tan importante, pero es muy difícil comprar una propiedad con ingresos propios y para las cooperativas de trabajo prácticamente no hay créditos o políticas públicas para que podamos adquirir los espacios. Adquirir el espacio es pensar en el futuro, cuidar los puestos de trabajo que existen en el presente y cuidar el proyecto político pedagógico que es lo más importante”, comentó la cooperativista.

La comunidad educativa de Mundo Nuevo es amplia, además de los 74 miembros de la cooperativa, asisten más de 300 alumnos y alumnas en los niveles inicial y primaria que organizados están en la búsqueda de financiamiento y recaudación de fondos para poder alcanzar el espacio propio.

Entre las actividades que destacan de la gestión social educativa propuesta en la escuela están las asambleas donde alumnos y alumnas pueden discutir temas que movilizan su cotidianidad dentro y fuera del aula y sobre todo temas relacionados al buen funcionamiento de la convivencia, “Las tareas en relación a la convivencia son importantes, la limpieza del aula, el orden de los materiales comunitarios: acá cada niñe no tiene una cartuchera individual, sino que es todo compartido todas esa tareas de uso cotidiano son planificadas y hay una división de encargados y encargadas en donde todos y todas en algún momento del año pasan por alguna de esas tareas, desde barrer el aula hasta ordenar los cuadernos, llevar residuos orgánicos al compost, todo está trabajado cooperativamente y esto también se refleja en el dictado de los contenidos áulicos, como en cualquier escuela también la práctica es reflexiva, colectiva democrática”, concluyó.

Habrá celebración por los 50 años de la escuela del barrio de Villa Crespo y será el 22 de octubre en la calle, abierta a la comunidad en donde se realizarán actividades culturales habrá música para abrazar el proyecto de educación de gestión social.

Fuente: Mundo Hormiga (FM La Tribu).