La Cooperativa de Recuperadores Urbanos de Mendoza Limitada (Coreme) sufrió la intempestiva clausura del galpón donde tienen todas sus maquinarias y donde reciben los materiales para reciclar y comercializar. Esta Cooperativa tiene una historia de 15 años de trabajo, y hace seis años había obtenido un terreno en comodato con la Municipalidad de Las Heras.

En estos días, el municipio clausuró el espacio señalando algunas faltas de la entidad. El presidente de la Cooperativa Coreme, Mario Campero, explicó a una radio local: “Tuvimos una reunión con el municipio, nos dijeron que el comodato de la planta está vencido, nos hicieron actas por tener un digestor cloacal,. No hay cloacas en esa parte del parque industrial en el que estamos y hemos reclamado las cloacas, lo mismo que el agua potable. Sólo tenemos agua de riego, de un pozo que no se puede tomar porque los suelos están muy contaminados, con salitre”.

Particularmente, desde la Municipalidad señalaron que los terrenos no les pertenecen y sería ilegal permanecer ahí. En este sentido, Mario Campero explicó: “El comodato no sirve, porque los terrenos no se saben de quién son. Así que la única alternativa que nos han dado, es dejar nuestro galpón en el parque industrial e irnos a un Centro Verde, que ha hecho Las Heras. Quieren que desarmemos nuestra maquinaria para trasladarla a otro lado, pero no podemos continuar en el galpón porque es ilegal.

Sin embargo, el presidente de Coreme criticó el proceder: “Desde que supimos la noticia, he estado hablando con muchos profesionales y los terrenos han sido cedidos por la provincia a la intendencia de Las Heras. Aparentemente es un tema político, de que no quieren que sigamos trabajando en nuestro galpón. Y la decisión de la comisión de socios es no trabajar con otro grupo de trabajo. No porque tengamos problemas, sino porque queremos seguir teniendo nuestra independencia, mantener nuestro formato de trabajo que no es ni parecido a los que hacen en el Centro Verde”.

En cuanto a la clausura, Campero sostuvo: “Creemos que podemos arreglar los papeles, si hay que pagar multa no hay problema. Pero no nos parece que cierren la planta porque tenemos 45 familias que esta semana no sabemos cómo vamos a hacer para comer”.

Por último, el cooperativista agregó: “La solución más práctica para nosotros es que alguien en algún lugar fuera de Las Heras, nos preste por un tiempo un lugar hasta conseguir uno definitivo. Tenemos la maquinaria, los circuitos de recolección, movilidad y la mano de obra de los compañeros para seguir trabajando”.

Fuente: Radio Tierra Campesina.