La Cooperativa La Múltiple comenzó como una cooperativa de comunicación, orientada a visibilizar las luchas por la defensa del territorio y de los modos de producción sustentables. Con el tiempo, comprender la importancia de “hacer para poder comunicar” la llevó a integrarse de lleno a la red patagónica, donde conviven Cooperativas de trabajo, grupos de compras comunitarias y experiencias asociativas surgidas del mercado comunitario de Bariloche y de otros espacios de organización popular.

Dentro de la red confluyen entidades diversas: Cooperativas de Bariloche, de Jacobacci, de Fernández Oro, grupos de consumo surgidos tras el debilitamiento del mercado comunitario, y organizaciones vinculadas al centro atómico y a Cooperativas de vivienda. Cada una aporta su trabajo desde la producción, la elaboración o el consumo consciente, en un circuito que busca garantizar alimentos agroecológicos y accesibles para los barrios.

La falta de un espacio físico propio no detiene la tarea. La red funciona en sedes rotativas, alojándose en los locales y dispositivos que cada grupo puede ofrecer. Mientras tanto, continúa la lucha por recuperar el histórico mercado comunitario de Bariloche, un ente autárquico creado a partir de experiencias cooperativas y que, según sus integrantes, debería volver a cumplir su función social y logística. Aunque el edificio cuenta con instalaciones estratégicas —cámaras de frío, vehículos, ubicación junto a las vías del tren—, desde 2021 su actividad se fue reduciendo por decisiones políticas que derivaron en su virtual paralización.

Pese a ello, los actores de la red mantienen vivas sus tareas: reciben verduras del Valle y de grupos cooperativos de Viedma y Patagones, distribuyen en los barrios a través de quince nodos, sostienen espacios asamblearios y promueven actividades comunitarias como ferias, verdurazos y celebraciones populares. La defensa del mercado comunitario se volvió uno de los ejes de trabajo y, ante la falta de respuestas municipales, impulsaron incluso una estrategia judicial para evitar su desaparición definitiva.

A lo largo de estos años, el mercado ha demostrado su valor estratégico. Durante emergencias recientes, como los incendios en la zona de Magallanes, sus instalaciones podrían haber sido fundamentales para recibir donaciones y canalizar ayuda, así como para apoyar a pequeños productores afectados. Sin embargo, la falta de funcionamiento impidió aprovechar esa infraestructura.

El futuro del movimiento cooperativo patagónico se proyecta con trabajo horizontal, articulación constante y presencia territorial. Las Cooperativas que integran la red seguirán coordinando esfuerzos, sumando nodos barriales y fortaleciendo la distribución de alimentos agroecológicos. En un contexto de dificultades políticas y logísticas, su apuesta continúa siendo la misma: sostener una experiencia colectiva que garantice alimentos sanos, espacios participativos y decisiones construidas desde la comunidad.

Fuente: Elaboración propia a partir de entrevista realizada en Radio Nacional Viedma (Viedma, Río Negro).