La Cooperativa de Recuperadores Urbanos de Mendoza (Coreme) Limitada difundió un material ilustrativo para explicar cuál es su función e informar acerca de los materiales que no reciclan en su organización, por tener algunas limitaciones.

Esta Cooperativa, que funciona en el departamento de Las Heras, en Mendoza, buscó desde sus comienzos que la realidad y el trabajo de las y los recuperadores urbanos pudieran tener más opciones, con inclusión social y de manera organizada.

En este sentido, desde la entidad señalaron: “Desde hace casi dos años comenzamos a crear este espacio, con compañeras y compañeros, aprovechando material, capacidades y propuestas. Gracias a mucha gente, sobre todo de la Universidad Nacional de Cuyo, nos vamos capacitando y aprendiendo en equipo, compartiendo, dándonos a conocer de otra manera. Es un camino que recién empezamos a transitar”.

Durante este recorrido y crecimiento, la Cooperativa Coreme reconoció la fortaleza de trabajar en vínculo con otras organizaciones: “Tenemos convenios con diferentes grupos, ya sean pares, empresas o instituciones, vamos a los lugares según lo hayan solicitado y nos reunimos para ver cómo trabajar juntos, o vienen y nos visitan. Tenemos la gracia de ser parte de diferentes grupos y eso nos ayuda a crecer. Compartimos la información, nos ayudamos entre todos y todas”.

Una opción para sumarse a este trabajo fundamental para la protección del medio ambiente, es crear un punto verde; es decir, un punto de recolección que la organización ubica en sitios específicos donde la gente separa y junta el material reciclable. Así, desde la Cooperativa Coreme indicaron que si la comunidad o en las escuelas, pueden reunirse y contactar a la Cooperativa para retirar los materiales.

En cuanto a los materiales que aún no reciclan, esta Cooperativa indicó que no recibe residuos orgánicos, como cáscaras de fruta, verduras, yerba mate usada, comida, pelo, semillas, pasto, ramas, residuos de jardín y pedazos de madera. Este es un proyecto en el cual pretenden avanzar para incorporar a sus tareas de reciclado.

A su vez, tampoco reciben líquidos como aceite, mezclas, agua, alcoholes, pegamentos o pinturas. Ni residuos peligrosos como los hospitalarios, tóxicos o resinas. Otro material que aún no pueden trabajar es el vidrio, por lo tanto, no reciben focos, tubos de luz o lámparas. Sin embargo, esta entidad ofrece contactos para acercar este tipo de materiales, ya que existen otros lugares en la provincia para depositarlos.

Fuente: Redes sociales Coreme.