Ante la monopolización de la plataforma virtual para hacer pedidos de comida u otros, crearon una aplicación local, desde un modelo de negocios cooperativista, que es más rentable para todas las partes del circuito comercial.

La Cooperativa de Consumo y Servicios Concretar Limitada tiene más de 20 años en Resistencia, Chaco, y asumió en 2020 nuevos desafíos pronto a su presentación en sociedad en enero de este año. Uno de ellos es la aplicación ConcreYa, que ofrecerá una alternativa para pedidos en línea y servicios de entrega a domicilio.

Hay pocas empresas internacionales de alcance nacional que ofrecen este servicio, como Glovo o Pedidos Ya, en el caso de Chaco se limita únicamente al primero y con zonas reducidas de alcance.

En un relevamiento federal de 2020, señalaron que hay una persona muerta por día entre las que hacen servicio de entrega a domicilio. Es una actividad de riesgo y aunque no cambiaría ese riesgo, desde Concretar apuntan a que el trabajo tenga mínimamente lo que marca la ley. Mueven un volumen de transacciones muy importantes, como todo monopolio, y es muy caro pero como es el único que hay, lo usan igual, explicaron.

El referente de la Cooperativa, Diego Martín, explicó a El Portal de la Cooperativas que este tipo de servicio “asfixiaba” en momentos de plena pandemia y el comercio se encontraba con que era el único canal de venta “y no tenía otro”. Por una cuestión cultural “se acostumbró a usar la app de delivery y se aprovechó ese momento para aumentar las comisiones a los locales”, indicó.

“Nos paramos del lado del repartidor: se tiene que hacer monotributista, pagar el seguro de la moto, la póliza de accidentes, y hacerse cargo de todas las causas a la hora de desarrollar su actividad, todos los errores de cancelación de pedidos quedan a cargo de él”, subrayó y agregó que ante cualquier problema “lo tiene que resolver con un chat de soporte que es un bot, no una persona”.

“Por donde lo analizas es un desastre, la única que gana es la empresa”, aseguró y contó que empezaron a pensar el porqué era así, sin encontrarle mucha respuesta. Como Cooperativa se preguntaron qué tan complejo era hacer una plataforma de delivery, primeramente, desde los tecnológico. “Encontramos que tenía cierta complejidad. La Cooperativa realizó inversiones a lo largo del año para desarrollar una plataforma que funcione tanto para el comerciante como para el consumidor”, dijo.

Un comercio paga 30% de comisión a estas empresas de cadetería, entonces en la plataforma hay un precio y cuando se llama al local vale menos. Entonces, señaló Martín: “Una herramienta que debería potenciar el comercio, en momentos de pandemia y no pandemia, el circuito de lo económico y aumentar el trabajo, al final sirve solamente para una pata del circuito, que encima es extranjera”.

La aplicación ConcreYa ya está colgada en el playstore, lugar de descarga para celulares Android. A mediados de enero se espera hacer un lanzamiento en Resistencia. “Con una lógica totalmente diferente, que apunta a descomprimir al comercio en general, con un esquema amigable”, aseguró.

Con respecto a la persona que hace el reparto, la Cooperativa se hará cargo de la moto, se le entregará la mochila y el uniforme sin cobrárselo, “que es lo que corresponde”, añadió. También se le otorgará cobertura de salud: “básica al principio, porque es un gran esfuerzo que la Cooperativa se haga cargo de todo esto”; estas situaciones que suceden generalmente en otras plataformas donde hay un problema en el circuito comercial, “Darle un servicio un soporte y un respaldo para que (quien reparte) no lo banque de su bolsillo. No es tan difícil, es difícil llegar hasta ese punto, pero es cuestión de voluntad”, afirmó.

Consultado por el modelo cooperativista en este tipo de negocios, expresó que se “tiene otra forma de pensar, diferentes tal vez a una empresa tradicional”. “No es que estemos en contra de otra plataforma o del desarrollo productivo, pero entendemos que son momentos donde si realmente no entendemos que la Argentina, la región y el mundo están en una situación crítica, donde hay que hacer un cambio de paradigma, no vamos a avanzar”.