La Cooperativa de Trabajo Vecinos Solidarios Ltda. tiene su accionar en el barrio El Garrote, en Tigre. Mujeres que en 2009 formaban parte del Programa Argentina Trabaja, se establecieron en 2012 como empresa social formal. Actualmente, la Cooperativa está integrada por alrededor de sesenta personas que se distribuyen tareas.

“Hace muchos años que estamos en el barrio haciendo cosas. Cuando nació Vecinos Solidarios, nació del barrio. En 2009 nosotras fuimos como vecinas adonde hoy está la Unidad de Gestión, fuimos, lo pedimos, dijimos que no podía ser que en el barrio fueran beneficiados los punteros políticos y que nosotros no podíamos acceder a esas oportunidades”, contó la referente de la empresa, Marcela Creciente.

En esa línea, señaló que “al tiempo nos llamaron, fuimos con un cuaderno con el nombre de las compañeras. No sabíamos lo que era una Cooperativa, no sabíamos nada. Mientras nos capacitaban en otras cosas, nos conocimos como vecinas, pudimos entender las dificultades que teníamos en el barrio y que no nos dábamos cuenta, porque nos faltaba la herramienta de empoderarnos y entender que teníamos el derecho de reclamar. Reclamamos una vereda, limpieza del barrio, y así nos fuimos fortaleciendo y nos organizamos”.

Uno de los emblemas que consiguió la Cooperativa fue la creación de un Centro Social, donde se realizan talleres, actividades y capacitaciones.

En las calles

Actualmente son treinta personas las que se encuentran trabajando activamente. Diez, forman parte de un proyecto productivo de panificados; y diez más se encargan del cuidado de niños y niñas de sus compañeras que salen a trabajar.

Las diez restantes, iniciaron en 2021 una campaña de concientización sobre la separación de residuos, y ahora pasan casa por casa recolectándolos: “Las compañeras pasan con un carrito por las casas, previamente habiendo hecho una tarea de ir pasando por casa, dejando bolsas, explicando de qué se trata, para que los vecinos puedan dejar ahí todo lo que es reciclable. Pasan todos los días a la mañana y lo retiran”, detalló la cooperativista.

“El barrio cuenta con novecientas casas más o menos. Somos muchas familias que, al ser un barrio popular, no cuenta con urbanización, no tiene calles grandes, solamente dos que son las entradas principales al barrio y después cuenta con calles internas por las que no pasa el camión de basura. Hay volquetes donde se tira la basura, y no dan abasto. Y esto les sirve a las compañeras para tener una entrada, y también sirve para la concientización del barrio y también lo deja más limpio”, explicó Creciente.

En esa línea, afirmó que “es una ardua tarea, falta concientizar al vecino. Nosotros vivimos en la costa del Río Luján. En el río había muchas botellas, mucha basura. Al empezar con esta tarea hace dos años, lograron sacar bastante basura de estos lugares. Si bien los residuos sirven para volverse a utilizar, eso crea un cambio de vida porque también va enseñando a que todo vuelve, y que hay que cuidar el ambiente”.

Para poder continuar sumando herramientas que agilicen y beneficien su labor, la Cooperativa está gestionando ante el Ministerio de Ambiente de la Provincia de Buenos Aires para que les entregue una máquina enfardadora, lo que permitirá aumentar la cantidad de residuos tratados, y dará trabajo a más personas.

Fuente: Elaboración propia a partir de entrevista realizada en Radio comunitaria Ore Tape (Benito Juárez, Buenos Aires) y en el Programa Una x Semana AM 1010, que se emite en Onda Latina (CABA).